Tenía pendiente publicar algo sobre la reciente sentencia del Tribunal Constitucional en España dando validez definitiva al matrimonio gay. Pues aquí está, recién terminado el poema. Creo que queda clara mi postura al respecto.
Imagen: Rafael Perez, naiveartist
MATRIMONIO
Tu sonrisa
me cautiva,
tus ojos me
dicen “ven”
y a mí no
me queda otro
remedio que
obedecer.
Enlacemos
nuestras lenguas,
desnudémonos
después
y dejemos
que el deseo
represente
su papel,
despertando
los instintos
que laten
bajo la piel.
Saborearé
tu glande,
exploraré
tu vergel,
me
internaré por tu recto
y allí me
derramaré.
Esperaremos
un poco
y lo
haremos al revés
entre
caricias, “te quieros”
y gemidos
de placer.
Soy feliz,
puedo decirlo
con
completa lucidez,
feliz con
nuestro cariño,
nuestro
compromiso fiel,
y con el precioso
niño
que
adoptamos hace un mes.
Desde que
está con nosotros
cada nuevo
amanecer
es promesa
de alegrías,
de juegos y
de porqués,
que duran
de la mañana
a la noche,
como ayer
cuando vino
a nuestro cuarto
brincando
como un lebrel
y se acostó
en nuestra cama
porque
decía temer
a los
monstruos que acechaban
en el
turbio anochecer.
Viendo su
rostro dormido,
tan dulce
como la miel,
me estremeció
la ternura
de la
cabeza a los pies.
El cariño que le damos
lo acepta con avidez
y luego nos lo devuelve
multiplicado por diez.
Será todo
un privilegio
acompañar
su niñez,
le
educaremos con mimo
y le veremos
crecer.
Es una
hermosa familia
la que
formamos los tres,
y juntos no
habrá barrera
que no
podamos vencer.
Ni siquiera
los cerriles,
los que no
nos pueden ver,
los que
afirman que dos hombres
no se tienen
que querer,
ni siquiera
podrán ellos
turbar
nuestra placidez.
Me cansan
sus argumentos,
que rayan
la estupidez.
Tiene
gracia que enarbolen
en nuestra
contra una fe
de cuyos
dogmas aceptan
lo que es
de su parecer,
pasándose
por el forro
lo que no
les viene bien.
Permítanme
que les diga,
sin ánimo
de ofender,
que es una forma
curiosa
(y cómoda)
de “creer”.
Aunque yo
preferiría
que
lograran entender
que no
somos anormales
ni
delincuentes, y que
nuestro
amor es puro y bello
como lo es el
de cualquier
otra persona,
sin más
ni menos
que merecer.
A todos los
que persisten
en su odio
ruin y soez,
¡que les
duelan nuestros besos
si les
tienen que doler!
No pienso
pedir disculpas
a esa
canallesca grey
por esta naturaleza
que yo no pude escoger.
que yo no pude escoger.
Que sigan
con sus insultos,
que sigan
con su desdén
y sus
chistes de maricas
llenos de
falsos clichés.
Que vomiten
su desprecio
y que se
ahoguen en él.
Ya no les
tenemos miedo,
ya nadie
tiene el poder
de
encerrarnos en la cárcel,
no tenemos
que esconder
nuestra
condición fingiendo,
viviendo
con un corsé
en el alma,
temerosos
de que se
llegue a saber.
Aquellos
tiempos oscuros
ya nunca van
a volver.
No
buscaremos venganza,
me conformo con tener
y la Justicia también.
Nuestro
hijo es nuestro tesoro,
el amor
nuestro sostén,
viviremos
nuestra vida
libres, con
orgullo y prez,
y seremos
tan felices
como lo
podamos ser.
Hoy el
Constitucional
ha resuelto
de una vez,
tras siete
años de espera
ha cumplido
su deber,
prevaleció
la cordura
y podemos
mantener
que el
nuestro es un matrimonio
con todas
las de la ley.
Y a
aquellos que les ofenda,
por mi parte… ¡que les den!
Precioso, preciso, amoroso y combativo. Felicidades una vez más, Rumeinia.
ResponderEliminarPesisamente me has pillado escuchando a Prince, cuya sexualidad siempre ha sido objeto de polémica, como si importara una mierda ante la magnitud se su obra.
ABRAZOS!!
Muchas gracias Mario, y perdona por la tardanza en responder.
EliminarIncluso aunque la obra de Prince no tuviera la magnitud que tiene, con quién se vaya a la cama importaría una mierda.
Un fuerte abrazo.